El primer significado de la buena fama es el renombre que cada uno construye de sí mismo. Así lo refiere el conocido refrán : "Cría fama y échate a dormir". Esta tradición oral considera que uno mismo es igualmente partícipe en crearse mala fama :"Por un perro que maté, me llamaron mataperros". Ambas sentencias transmiten la idea de que la fama es algo que permanece en el tiempo, más allá del presente. En la actualidad observamos que más que la fama en sí, lo que destaca sobre todo es el lucimiento de quienes la reciben : los famosos. En esta version actual de la fama, no se trata tanto del prestigio sólido de un creador, que el paso del tiempo haya refrendado. Ahora son los intereses comerciales o las modas y las ganancias económicas que conllevan, quienes organizan y distribuyen esta nueva versión de la fama. Estos famosos se expenden en los platós de televisión o en algunos medios y los consagran el número de seguidores que alcanzan en las redes sociales. Se a
Escuchar, pensar y cuestionar fueron los propósitos con que nació este blog hace ya unos años. Planteamos hoy aplicar este enfoque a la carta que el Presidente del Gobierno ha dirigido a la ciudadanía. Representa un hecho social sin precedentes que nos estimula para modificar nuestro ritmo habitual de encuentros. Si como señala en la carta, su intención personal es la de reflexionar, nos anima para mantener este mismo propósito, a la vez que pretendemos corresponder a la cortesía de escribirnos. En la carta nos hace un relato completo y ordenado de hechos que le afectan y que interpreta políticamente como una estrategia de acoso y derribo por parte de la oposición. Como líder nacional pareciera querer obtener al mismo tiempo, empatía e identificación por parte de los ciudadanos, ante la situación que atraviesa. Pedro Sánchez al escribir esta misiva lo hace tanto como Presidente votado por los españoles a través del Congreso, como el marido de Begoña Gómez. Se duele que unos y