Las epístolas, aparte de mensajes, constituyeron en la Antiguedad todo un género literario. Así en el siglo I a. de C. Cicerón escribió 16 libros de epístolas. De esta época datan las epistolas morales de Séneca ad Lucilium. Siglos más tarde, durante el Renacimiento, adquieren el carácter de correspondencia entre personalidades relevantes. Destacamos la controversia filosófica entre Erasmo de Roterdam y Martín Lutero acerca del libre albedrio, recogida en la multitud de cartas que intercambiaron durante los primeros años del siglo XVI.
La correspondencia en estas primeras épocas constituyó una verdadera ocupación, sobre todo entre personas de un alto nivel . Más tarde se popularizó, al menos en los estados desarrollados de Europa, al crearse un servicio de correos regular durante el siglo XVII. La existencia de una red de ferrocarril permitió, en la segunda mitad del siglo XIX, la extensión y frecuencia del envío de mensajes entre la población en general, al mismo tiempo que disminuyó la tardanza en la recepción de las cartas. Estas, aparte de constituir un valioso 
intercambio literario, nos permitíeron el conocimiento de quienes así se relacionaban. Como ejemplo señalaremos las  94 cartas fogosas  (convertidas en el texto  "Miquiño mio")  que  Emilia Pardo Bazán, escribió a Benito Pérez Galdós entre 1883 y 1915 "en un lenguaje maravilloso y muy único"  según su biógrafa Pilar Álvarez.
 El correo electronico data de 1961 y su  nombre procede de su antecesor el correo postal. Por este medio se eliminó el tiempo que discurría entre la emisión y la recepción de las misivas. Se inaugura de este modo la epoca de LA INMEDIATEZ DE LOS MENSAJES. La liturgia y el tiempo de las cartas manuscritas al igual que la espera e inquietud en la recepción de las mismas, desaparecieron.
No solamente se volvió inmediata la correspondencia epistolar. La aparición de los smarphones, que se inicia a principios de este siglo, y sobre todo el Wassap que nace en 2009, convirtieron en inmediatas y gratuitas las conversaciones directas entre los más de 2.000  millones de los usuarios de esta mensajería. Tal  revolución en los intercambios humanos ha venido aparejada de algunos aspectos a considerar. Según la consultora Kantar, empresa líder mundial de datos, el número de wassaps que acumulamos vistos, pero sin responder, es de un promedio de 47 diarios.   ¿Qué  hacemos con ellos dado que al día siguiente nos ocurrirá algo parecido?. El automatismo de nuestra contestación pudiera incluir la preocupación que el remitente empiece a hacerse preguntas si no le respondemos de modo instantáneo. Estas respuestas acaparan todo  nuestro interés, a veces incluso más que el propio intercambio que mantenemos con la persona que nos acompaña físicamente en esos momentos ("ningufoneo"). La coreografía urbana que se nos impone es un universo de usuarios concentrados en sus móviles. En 2022 la media diaria de miradas a estos aparatos según la consultora citada es de 262. ¿ Como  afecta esta situacion a la vida  personal, laboral y social de los ciudadanos del siglo XXI ?. ¿ Puede llegar a constituir una  opresión  esta instantaneidad de Internet ?. Citemos ahora algunos autores contemporaneos: Cal Newport, de 40 años de edad, profesor de Informática de la Universidad de Georgetown, ha escrito  "Céntrate " texto que constituye un auténtico manifiesto de resistencia a estar permanentemente conectados. También el periodista británico Carl Honoré conocido por su best seller " Elogio de la lentitud " comenta : "En un mundo  de adictos a la velocidad nuestro superpoder es la lentitud"
¿Y TÚ QUÉ PIENSAS?.
Si no respondes a un mensaje de WhatsApp la otra persona se impacienta, pero si estás en una conversación fluida y por lo que sea tienes que cortar (te suena el teléfono, te habla alguien que tienes al lado, vas en un transporte y tienes que bajar...) aún es peor, porque le has dejado en "visto". 🤔
ResponderEliminarPara los jóvenes aún es peor, es la generación del ya.
Nos hemos convertido en esclavos de los whatsApp, sin distinguir los mensajes urgentes a los videos que a veces sólo le hace gracia a la persona que los manda, pero te ves en la necesidad de ver el móvil cada vez que escuchas el sonido de un whatsApp entrante.
ResponderEliminarHemos sustituido las llamadas por mensajes que a veces son simple cortesía, pero por suerte todavía la voz en una conversación es más entrañable que un mensaje, hay empatía más allá de todos los emoji que puedas mandar; y ¿cuántas personas se sienten ofendidas en un grupo donde se escribe sin pensar en el daño que puedes hacer?
Luisa Álvarez-Ossorio
Acabo de escribir mi comentario y no se ha publicado. Probablemente lo he hecho mal. Resumo lo que he expuesto anteriormente: los WhatsApp es un medio para comunicarse grupos de amigos o grupos de personas que tienen una tarea común. Sin embargo la relación epistolar por escrito la hemos perdido prácticamente en su totalidad. Esto es una pena ya que este medio nos daba mayor oportunidad para comunicar los sentimientos y reflexionar sobre lo que queríamos decir y expresar. Bueno es el signo de nuestro tiempo la rapidez.
ResponderEliminarEDUARDO ha escrito:
ResponderEliminarEl ya es impulsivo, el luego reflexivo..las RRSS, la mensajería instantánea,etc ...sirven a la necesidad que , como humanos, tenemos de comunicarnos, socializarnos..pero, mas que servir,la utilizan. Convierten esa necesidad, ese anhelo, en combustible para desnaturalizarla, deshumanizarla.
Dejamos de ser para solo estar.
Estar conectados a dispositivos que con el señuelo de conectarnos y acercarnos nos separa, nos aleja de lo personal y humano para convertirnos en impersonales, impulsivos, irreflexivos...consumidores.
La inmediatez, la preocupación que se vuelve obsesiva por mirar continuamente el wasp o el email, es la esclavitud del siglo XXI. Este tipo de comunicación ha deshumanizado la comunicación entre los seres humanos. Se prefiere la rapidez, los emoticonos y el hablar mediante símbolos a la calidez de la voz amiga, con sus tonos y matices . ¿ Estamos más comunicados o más aislados? Sin duda decimos más palabras a más personas, pero hemos perdido la autenticidad de la verdadera comunicación.
ResponderEliminarEl psiquiatra LUIS PEREZ TORRES ha comentado:
ResponderEliminarMuy bueno ,es horrible que tengamos una media de mas 250 veces mirando el movil.Y hay un adpecto mas preocupante :SON ONDAS Electromagnéticas LAS QUE RECIBIMOS.Y VETE A SABER EL DAÑO PUES LA IDEOLOGIA DOMINANTE NOS QUIERE HACER CREER QUE SON INOFENSIVAS.
Un abrazo .
Juan Luis cuando puedas si se te apetece echale un vistazo a mi librito Luises (el yo unido) ,como ya te habré indicado otras veces.En este libro te nombro como gran promotor de Salto a la Tapia.gracias
https://www.bubok.es/libro/amp/269860/LUISES-EL-YO-UNIDO
MANUELA ALMUEDO, profesora de yoga, ha comentado:
ResponderEliminarBuenos días cielo, En la filosofía de Aikido dice, si te caes siete veces, levántate en ocho, yo soy hija de la posguerra, y con el tiempo, me he ido dando cuenta ,del gran sometimiento que tuvimos los adolescente , en esa época, por lo menos yo,y para mí ha sido una loza grande en mi vida 😘
No me gustan nade los ww.
ResponderEliminarCRISTINA desde la rebotica de su farmacia ha comentado:
ResponderEliminarMe ha parecido muy interesante el repaso histórico que haces a la comunicación escrita y como ha evolucionado hacia la inmediatez. Yo quería aportar que esa facilidad y abuso de los mensajes pro wasap también accarea una banalización de las comunicaciones entre las parsonas. Muchos wasap son prescindibles y por eso muchos ni se leen ni se contestan, aunque.yo siempre lo hago por educación, es cierto que si son muchos, puede ser agobiante y nos hace dedicar mucho más tiempo del que deberíamos a ello.
Y eso nos lleva al "ningufoneo", me ha encantado el término!! Yo me siento con frecuencia "ningunofoneada".
Juan como siempre buen articulo que nos hace pensar,hasta donde repercute nuestra comunicación con los demás,la mirada la escucha....Me he sorprendido la respuesta tan inmediata que hemos tenido ante este tema,¿Nos preocupa?Ahi queda,Isabel Montaño Besos
EliminarUn grupo de americanos contrata unos sherpas para realizar una excursión cerca del Everest.
ResponderEliminarEl grupo avanza liderado por los turistas americanos que imponen su ritmo. Al cabo de una hora los sherpas se detienen y descansan un buen rato para posteriormente incorporarse a la marcha.
El evento de detenerse cada cierto tiempo, se repite e inquieta a los americanos que ofreciéndoles dinero y bebidas, reclaman no interrumpir permanentemente la marcha. Finalmente obligándoles a una explicación ante su actitud, los sherpas responden - Vosotros vais demasiado de prisa, nosotros nos vemos obligados a detenernos para esperar el alma.
Este relato está contenido en el film AZUL, comentado por dos personajes.
MANUEL OSUNA ha comentado:
ResponderEliminarEl correo electrónico y el wassaps medios de comunicación revolucionarios en su momento, y eminentemente prácticos, su excesiva e inadecuada utilización en la mayoría de las ocasiones, hacen de su uso, una auténtica pesadilla para mí, recibes mensajes infinidad de ellos repetitivos, y algunos desafortunados.
Con ellos cualquier atisbo de comunicación desaparece.
El escritor SALVADOR COMPAN reflexiona con su habitual saber:
ResponderEliminarPienso que en tu texto está muy bien traída esa evolución de la comunicación epistolar, lenta y reflexiva, a este otro flujo de comunicación (que no de información) que inunda hoy los móviles y ordenadores. Se ha impuesto el acortamiento y la fragmentación del texto: de la extensión de una carta de Cadalso o Montesquieu, al tamaño de un panfleto, de un anuncio, de una nota, del possit o del emoticono.
Quizá estemos de acuerdo que, en general y hablando de pensamiento, cantidad y calidad suelen ir en paralelo: las ideas no caben o se simplifican y pierden sustancia en el tamaño de un anuncio o de un guasap. A menor extensión, más sentimiento y menos elaboración del pensamiento. Un anuncio ( y casi un aforismo) es un puro impacto emocional y es eso, a parte de una información básica, lo que se suele perseguir en guasap o mensajes.
Pero lo peor es la inflación de textos (o de micro textos) que no son necesarios y terminan produciendo ruido, cuando no desinformación. Y esos excesos de protagonismo, en llamar la atención del otro sin más motivación que la de hacerse notar como emisor. Muchas veces, en el fondo, son mensajes que uno se manda a sí mismo, a mayor gloria de su ego. Se sobreactúa en los guasap, se arropa uno con la cultura ajena (enviando noticias o textos, canciones, imágenes…) o convirtiéndose en el portador de la noticia, metido ya de lleno en los síndromes de notoriedad como ser el que desenfunda más rápido, el que ve tierra por primera vez, el más listo de la clase.
Bauman, cuando creó la metáfora de sociedad líquida para describir a la sociedad digital, sabía bien de qué hablaba. Lo deja clarito en su libro.
Abrazos, Juanlu.
Yo pienso que, tras la exposición de Salvador Compán no tengo nada que aportar, salvo compartir su idea.
ResponderEliminarMANOLI CAÑADAS comenta:
ResponderEliminarHola Juan Luis ya te puse en un comentario en el blog que lo lógico del whatsapp sería solamente los grupos que tienen una finalidad o una tarea en común, como un club de lectura grupos familiares en donde se comentan cosas pero mmm la mayoría de los grupos no tienen razón de ser y además es como habéis comentado un lucimiento personal que no viene a cuento.
La comunicación epistolar la veo definitivamente de momento, perdida, aunque sería muy bueno, que intentáramos recuperarla.
EL profesor de Filosofía JOSE MARIA ROMERO comenta :
ResponderEliminarEn el aprendizaje necesitamos ir despacio para avanzar. Sobre todo, cuando el tiempo es escaso. En mi experiencia en Educación a distancia, solía aconsejar: si quieres ir deprisa, ve despacio.
Y para aprender descubriendo lo esencial de la vida, no hay más remedio que ir captando lo importante en el punto donde se unen el espacio y el tiempo.
Entonces, el instante es eterno, nos da confianza, pervive en nosotros, es un referente de los momentos de vida.
Se vive en la amistad, siendo a su vez referente para el amor que nos constituye como humanidad.
Vivido así, con las posibilidades que nos dan las nuevas tecnologías, es gozoso el momento en que se conectan los amigos de verdad.
MARIA VALLE LAGUNA docente en psicoanálisis ha comentado:
ResponderEliminarFelicidades Juan Luis por este blog y por la elección de los temas, muy pertinentes todos ellos y sobre los que es necesario pensar y pronunciarse.
La tecnología y lo digital es sin duda un desarrollo que ha traído aspectos positivos y ventajas de diversa índole, pero, concretamente la inmediatez en la comunicación, la veo en cierto modo como un movimiento regresivo. Regresivo en primer lugar porque implica la imposibilidad de la "espera", no poder demorar la satisfacción, no poner en latencia la necesidad y dificultades para tolerar las frustraciones; estas carencias impiden que se pongan en funcionamiento los procesos de pensamiento.
Un segundo aspecto de lo que me parece regresivo es la dificultad para estar solo, hay la necesidad de estar permanentemente en comunicación y contacto con el otro.
Un tercer aspecto sería la predominancia de lo visual a través de fotos, videos y emoticonos. Lo visual, en el sentido de lo sensorial, más primario, estaría sustituyendo la palabra.